Cuanto más nos demos permiso de no sentirnos bien cuando eso es lo que se presenta, más suaves caeremos, en nosotros mismos y en la vida.
Puede sentirse como un colapso intenso cuando hemos tenido dificultades para cuidarnos a nosotros mismos/as durante mucho tiempo o no hemos podido o no se nos ha permitido darnos el espacio que necesitamos. Lo que podemos experimentar entonces es una inundación repentina de vulnerabilidad. No poder seguir adelante, estar completamente abrumado/a, un agotamiento inminente,...
Todos tenemos derecho a experimentar bajones naturales en nuestras vidas. Al igual que las estaciones, esto es parte del ciclo de la vida.
Cuando nos sentimos muy vulnerables o nos encontramos en un período (corto o largo) en el que las cosas no se sienten tan bien o nos sentimos perdidos, a menudo perdemos de vista el hecho de que también hay un regalo escondido en esta experiencia.
Es cierto que no siempre es fácil ver esto, especialmente cuando estamos experimentando toda la fuerza de la tristeza, la ira, la decepción, la desesperación, los pensamientos negativos abrumadores, el dolor o cualquier otra cosa. Sin embargo, el regalo sólo se hace visible cuando nos damos permiso de ser vulnerables y honrar nuestra vulnerabilidad.
Te abres, por así decirlo. La coraza que en lugar de protegerte te mantiene en la dureza, pierde su fuerza y aparece el verdadero oro interior.
Tu diversidad, tu humanidad.
No estamos programados para estar siempre alegres. Quizás estemos programados para pensar que esto es siempre necesario.
Pero eso no nos ayuda. Y no es nada natural.
Tampoco nos ayuda a evolucionar, aunque parezca que sí.
Aunque a veces parezca que si nos esforzamos, sonreímos un poco más o aprendemos a “pensar más positivamente”, seguiremos adelante.
No olvidemos nuestra humanidad, aquello que nos hace hermosos como seres vivos.
Dejémonos vivir, y eso también significa experimentar el flujo y el reflujo, y darnos permiso de ir con la corriente. Hace que nuestras vidas sean más ricas y auténticas. Más profundas y, en definitiva, más saludables.
Lo que puede ayudarnos con esto es tratarnos a nosotros mismos con amor, comprensión y compasión. Cuanto más amables seamos con nosotros mismos, más gentiles seremos con todas las partes de nosotros mismos. Cuanto más nos aceptamos a nosotros mismos, incluimos las partes de nosotros mismos que a veces preferimos descartar.
Algunos ejemplos de cómo cultivar el amor por nosotros:
Celebramos nuestros éxitos diciéndonos que hicimos esto o aquello bien. Invitamos la ayuda a nuestras vidas al aceptar un gesto amable de otra persona; por ejemplo decimos 'gracias por decirme esto' o 'recibo esto'. Analizamos hasta qué punto hemos hecho todo lo posible cuando algo no sale como esperábamos y nos lo confirmamos a nosotros mismos. Nos damos todas las oportunidades que necesitamos para florecer porque decimos dentro de nosotros mismos: “Yo soy merecedor(a)”.
Al adoptar una actitud de amor propio hacia nosotros mismos, creamos un entorno invisible en el que podemos prosperar, sentirnos mejor y ser más amados. Se crea una nueva cubierta, una cubierta suave que protege de forma amorosa y sana, sin cerrar ni confinarnos.
Requiere un cambio en la forma en que nos relacionamos con nosotros mismos.
Y sí, tenemos el poder de crear esto para nosotros mismos, incluso si el mundo exterior piensa diferente o no todos nos entienden.
Eso está bien, y siempre habrá al menos algunas personas que te mirarán de forma extraña cuando te des una palmadita en la espalda.
No todos tienen que tener la misma actitud.
Pero tú, si quieres crear más suavidad para ti mismo/a, y permitirte ser tú mismo/a en todas tus facetas, entonces eso significa que vas a cultivar más amor por ti mismo/a. Este amor permanece contigo siempre y hace tu vida más fácil de muchas maneras diferentes.
También simplifica tus relaciones con los demás, tu vida profesional, la forma en que experimentas tu vida diaria y cómo te posicionas ante la vida.
¿Te gustaría darte permiso para volver a ti y tu vulnerabilidad, suavemente? ¿Estás pasando por un momento difícil y te sientes estancado/a?
¿Sientes que estás a punto de colapsar o tienes miedo que esto pase? ¿Tienes curiosidad por saber cómo puedes crear más amor propio?
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